La Federación autorizó treinta millones de pesos para el CERESO de Mérida que servirán para mejorar las condiciones de vida de los internos. El dinero será para construir dos nuevos módulos y ampliar esas instalaciones, adelantó el parlamentario federal Rolando Zapata Bello.
El diputado fue ayer a una reunión domiciliaria en el marco de su Diálogo Ciudadano en la Colonia Fidel Velázquez y aprovechando la presencia del Verónica Cen Itzá, quien comentó sus experiencias porque tuvo un familiar recluido, señaló:
“Como Secretario de la Comisión de Presupuesto en la Cámara de Diputados, impulsé que a través del Fondo de Garantía para el Apoyo a CERESOS en entidades federativas, se asignaran 30 millones de pesos extraordinarios, no contemplados, en el presupuesto federal de este año para Yucatán”.
“Con esta partida, que ya está en las arcas de la secretaría de Hacienda del Gobierno del Estado, se edificarán dos dormitorios para 160 personas cada uno y se ampliarán los separos del reclusorio”.
“Asimismo, se mejorarán las áreas de internos de alta peligrosidad, con VIH y los que requieren de aislamiento. Esto será fundamental para mejorar las condiciones de vida de los internos, en atención a las recomendaciones en materia de Derechos Humanos”.
El Centro de Rehabilitación Social del Estado tiene una población que fluctúa entre los 1,400 varones y 100 mujeres. Con los nuevos espacios se apoyan las acciones de readaptación en materia penitenciaria, lo que servirá para su reincorporación a la comunidad.
“El modelo de reinclusión a la sociedad se fundamenta en proporcionar una estancia digna a los reclusos. Cuando estas condiciones no existen, se dificulta la aplicación del tratamiento penitenciario”.
Se dijo que el Centro de Rehabilitación Social del Estado cuenta con una población que fluctúa entre los 1,400 varones y 100 mujeres. Con los nuevos espacios se apoyan las acciones de readaptación en materia penitenciaria, lo que servirá para fomentar actividades que fomenten su reinserción.
El modelo de reinserción social se fundamenta proporcionar una estancia digna a los internos, pero cuando se carece de esto, se dificulta la aplicación de un tratamiento eficiente y, por consecuencia, las bases de la readaptación.
El trabajo y la educación son los mejores medios para ayudar a los detenidos y han de ser dotados de contenido significativo a partir de las necesidades de los internos, pero también de las posibilidades y modalidades laborales que tiene la sociedad, porque la base y fundamento para este nuevo enfoque de la readaptación social son:
La mejora de sus condiciones de vida para la adquisición de hábitos positivos, los conocimientos indispensables y suficientes para su positiva conducción socio familiar y el desarrollo de su capacidad para no dejarse influir de un ambiente propenso a la criminalidad, así como la mejora de sus habilidades laborales.
Zapata Bello, comentó que la construcción los dos inmuebles en el interior del reclusorio estará bajo la responsabilidad de la Secretaría de Obras Públicas que elaboró el proyecto de acuerdo con las normas de seguridad en la materia.
Dijo que en el seno de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados se analiza el proyecto de Egresos de la Federación 2011 referente a las partidas destinadas a la seguridad pública, a los centros penitenciarios y a los programas de readaptación social que den pie al respeto de los derechos humanos.
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